Gaditano de 21 años, debutó con Emery con el primer equipo sevillista en las últimas jornadas de la Liga. Ahora juega la fase de ascenso a Segunda con su filial.
Diego González Polanco, joven defensa central de 21 años que milita en el Sevilla Atlético. Nacido en Chiclana de la Frontera (Cádiz) el 28 de enero de 1995, mide 1,85 de estatura. Se formó en la cantera del Cádiz, en cuyo primer equipo llegó a debutar en Segunda B con solo 17 años antes de ser captado por Monchi para el Sevilla hace dos temporadas. En su estreno como jugador del fútbol base sevillista, jugó cedido en el Granada B durante seis meses.
Se trata de un central potente, con buena salida de balón, que también ha jugado como medio centro de corte defensivo precisamente por su buena visión del juego y su seguridad en el pase a media y larga distancia. En este sentido, su perfil se asemeja bastante a Guitián. Diego González es un jugador que está en constante progresión y al que el Sevilla está dispuesto a promocionar en un equipo de mayor enjundia que su propio filial (pese a que pudiera darse el caso de que el Sevilla Atlético ascendiera a Segunda División, ya que está jugando una de las finales de la promoción ante el Lleida). El joven central chiclanero ha sido seguido por varios equipos del fútbol español en los últimos meses, entre ellos el Real Zaragoza y el Real Valladolid.
González llegó a jugar tres partidos con el primer equipo a las órdenes de Unai Emery en el curso que ahora termina. El primero, la ida de la eliminatoria de Copa del Rey en Las Gaunas ante el Logroñés de Segunda B, en octubre, que ganó el Sevilla por 0-3. Los otros dos, recientemente, en mayo, en la recta final de la Liga, cuando el cuadro de Nervión reservó a sus titulares en las últimas jornadas para que llegasen en condiciones físicas a las dos finales para las que los sevillistas se clasificaron, en la Copa ante el Barcelona y, en la Europa League, frente al Liverpool. Por eso Diego González jugó en el Sánchez Pizjuán ante el Granada (derrota sevillana por 1-4) y en San Mamés frente al Athletic de Bilbao (derrota por 3-1). Durante la pretemporada pasada, ya fue convocado para la Supercopa de Europa que el Sevilla jugó ante el Barça, aunque no salió del banquillo en esa ocasión.
En el citado estreno liguero ante el público sevillano, esa derrota con estrépito ante el Granada por 1-4, se dio la curiosa y anecdótica circunstancia de que el autor del gol sevillista fue precisamente Diego González: lo hizo en un taconazo sorprendente, en el minuto 74, que se quedó en la retina de todos los espectadores.
Este año ha jugado 32 partidos de liga en Segunda B con el equipo promesas del Sevilla, anotando dos goles. Además, los citados tres choques a las órdenes de Emery en el primer equipo, con ese golazo referido en su haber ofensivo. Y ahora lleva cinco partidos más de la promoción de ascenso a Segunda con el filial, que serán seis cuando concluya el cruce final ante el Lleida.
Diego González Polanco, joven defensa central de 21 años que milita en el Sevilla Atlético. Nacido en Chiclana de la Frontera (Cádiz) el 28 de enero de 1995, mide 1,85 de estatura. Se formó en la cantera del Cádiz, en cuyo primer equipo llegó a debutar en Segunda B con solo 17 años antes de ser captado por Monchi para el Sevilla hace dos temporadas. En su estreno como jugador del fútbol base sevillista, jugó cedido en el Granada B durante seis meses.
Se trata de un central potente, con buena salida de balón, que también ha jugado como medio centro de corte defensivo precisamente por su buena visión del juego y su seguridad en el pase a media y larga distancia. En este sentido, su perfil se asemeja bastante a Guitián. Diego González es un jugador que está en constante progresión y al que el Sevilla está dispuesto a promocionar en un equipo de mayor enjundia que su propio filial (pese a que pudiera darse el caso de que el Sevilla Atlético ascendiera a Segunda División, ya que está jugando una de las finales de la promoción ante el Lleida). El joven central chiclanero ha sido seguido por varios equipos del fútbol español en los últimos meses, entre ellos el Real Zaragoza y el Real Valladolid.
González llegó a jugar tres partidos con el primer equipo a las órdenes de Unai Emery en el curso que ahora termina. El primero, la ida de la eliminatoria de Copa del Rey en Las Gaunas ante el Logroñés de Segunda B, en octubre, que ganó el Sevilla por 0-3. Los otros dos, recientemente, en mayo, en la recta final de la Liga, cuando el cuadro de Nervión reservó a sus titulares en las últimas jornadas para que llegasen en condiciones físicas a las dos finales para las que los sevillistas se clasificaron, en la Copa ante el Barcelona y, en la Europa League, frente al Liverpool. Por eso Diego González jugó en el Sánchez Pizjuán ante el Granada (derrota sevillana por 1-4) y en San Mamés frente al Athletic de Bilbao (derrota por 3-1). Durante la pretemporada pasada, ya fue convocado para la Supercopa de Europa que el Sevilla jugó ante el Barça, aunque no salió del banquillo en esa ocasión.
En el citado estreno liguero ante el público sevillano, esa derrota con estrépito ante el Granada por 1-4, se dio la curiosa y anecdótica circunstancia de que el autor del gol sevillista fue precisamente Diego González: lo hizo en un taconazo sorprendente, en el minuto 74, que se quedó en la retina de todos los espectadores.
Este año ha jugado 32 partidos de liga en Segunda B con el equipo promesas del Sevilla, anotando dos goles. Además, los citados tres choques a las órdenes de Emery en el primer equipo, con ese golazo referido en su haber ofensivo. Y ahora lleva cinco partidos más de la promoción de ascenso a Segunda con el filial, que serán seis cuando concluya el cruce final ante el Lleida.
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