Mario Álvarez, ex del Pucela suena para el Zaragoza

Es una de las preferencias del Real Zaragoza para fortalecer su línea defensiva. 

Mario Álvarez, central español que va a rescindir contrato con el FC Bakú de Azerbaiyán, es uno de los favoritos de Víctor Muñoz para fortalecer la posición, una defensa en la que ahora mismo no cuenta con futbolistas profesionales en su eje.

El canario, que abandonó hace un año el Betis y firmó dos temporadas con el FC Bakú, tiene 32 años y los problemas económicos de su club le han obligado a romper su vinculación tras ocho meses sin cobrar. Con la carta de libertad en la mano, Mario busca ahora un posible regreso a España, aunque también cuenta con ofertas de Kuwait.

El Real Zaragoza tiene anotado en rojo su nombre como central veterano sobre el que construir una nueva defensa después de que otras de sus opciones prioritarias, como el uruguayo José Giménez (Atlético de Madrid), cuya cesión se había solicitado, apunte a divisiones mayores a expensas de lo que decida Diego Pablo Simeone.

Mario cuajó el curso pasado una notable temporada en Bakú haciendo pareja con el exosasunista Rubén González (que también ha dejado la entidad) a las órdenes de Milinko Pantic, exfutbolista del Atlético, pero los problemas de solvencia de la entidad han provocado el desmantelamiento del equipo, comenzando por el propio entrenador.

Mario Álvarez comenzó a entrenar este verano en Kazajistán esperando soluciones, pero, a falta de una semana de que arranque la nueva temporada, no han llegado y sus agentes ya le buscan equipo, con el Real Zaragoza bien posicionado si se confirma su regreso a España.

Mario es un central contundente y con experiencia en la élite. Ha militado diez temporadas en Primera División, con escalas en el Valladolid, en el Barcelona, en el Getafe, en el Recreativo de Huelva y en el Betis.

Se dio a conocer en el club vallisoletano, al que llegó en 2001,  con 19 años procedente del filial del Atlético de Madrid. Sus buenas actuaciones en Pucela le pusieron en el escaparate público y en 2003 fue reclutado por el Barcelona. Era el primer proyecto del presidente Joan Laporta, con Frank Rijkaard en el banquillo y con Ronaldinho como fichaje estrella. Sin embargo, su paso por el Camp Nou fue muy decepcionante.

Apenas disputó dos partidos con la camiseta azulgrana, uno en la Copa de la UEFA y otro en la Liga. Este último choque fue el que le marcó definitivamente. En su estreno liguero el cuadro catalán cayó estrepitosamente en la Rosaleda frente al Málaga por 5-1. La debacle supuso su condena.

Link: http://www.heraldo.es/noticias/deportes/futbol/real_zaragoza/2014/08/06/mario_agenda_303461_611027.html

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