30 puntos y fuera del descenso. El Real Valladolid hizo ayer por la mañana los deberes y se impuso, con un sufrimiento innecesario al final, a un rival directo en su lucha por la permanencia. Los blanquivioleta estaban obligados a ganar al Almería. Y lo hicieron. Querían sumar su sexta victoria de la temporada (quinta en el José Zorrilla). Y lo hicieron. Necesitaban salir de las tres últimas plazas. Y lo hicieron.
Todo gracias a un solitario y tempranero tanto de Manucho. El angoleño volvió a ser titular junto a Guerra. Y a su lado otros nueve jugadores que ya defendían la elástica blanquivioleta la temporada pasada. Ni un solo fichaje de esta campaña en el once inicial. ¿Toque de atención o necesidad de ‘tirar’ de lo conocido? El caso es que tras un susto inicial (un fuera de juego de Óscar Díaz que acabó con el balón en las mallas), Víctor Pérez, recuperado también para la causa, vio una incursión de Peña por la izquierda y este asistió a la perfección al delantero africano, que ya había tenido una en la primera acción y en esta no erró. Era el minuto 5. Mejor no podían comenzar las cosas.
El 1-0 tranquilizó a la parroquia, a los jugadores y al técnico, conscientes todos de lo que había en juego y de la necesidad de empezar mandando. Esta vez, al contrario que ante el Rayo Vallecano, no hubo un paso atrás tan descarado. Y los blanquivioleta, aunque es cierto que dejaron que la posesión fuese de los andaluces, tuvieron suficientes ocasiones para haberse ido al descanso con mayor renta. Guerra obligó a Esteban en el 8 y en el 14. Óscar hizo que el portero del Almería se luciese en el 26. Manucho pudo provocar algo en una alocada salida del guardameta rival... y así se fueron consumiendo los minutos con un runrún en la grada. El Almería iba dando pasos hacia delante aunque sin generar peligro, mientras que el Real Valladolid no ‘mataba’ el partido y las tuvo de todos los colores. El runrún estaba ahí.
La segunda parte siguió el mismo guión que la primera. El balón estaba más tiempo en las botas de los futbolistas del Almería, pero las ocasiones seguían siendo de los locales. El cuadro de Juan Ignacio Martínez sabía que si no marcaba podía sufrir más de la cuenta. Y así fue.
Larsson, en una contra en el 49; Guerra tras jugada del sueco, en el 65; Rueda, en el 72; y Óscar, en el 77, gozaron de oportunidades claras. La del sueco la paró Esteban tras una galopada desde su campo. La del pichichi es de las que no suele errar, en boca de gol, sin oposición, pero no pudo conectar el balón. La del central se fue al larguero. Y del salmantino se la llevó un defensa, más rápido en su acción.
Así que tras perdonar y a pesar de jugar con uno más, al Real Valladolid le tocó sufrir. Entraron Rossi, Jeffren y Omar para dar aire y sustituir a los ‘tocados’. Y llegó el momento del temblor. No es que el Almería le hubiese exigido mucho en defensa al cuadro local: algún tiro desde lejos y una acción entre Suso y Aleix Vidal, que se fue fuera; pero en cada falta o saque de esquina, ese runrún volvía a aparecer. No hubo ocasiones en la recta final, salvo un lanzamiento alto de Zongo al final, y el cuadro de Juan Ignacio respiró.
Hondo, muy hondo, porque los tres puntos de ayer eran necesarios como el comer. El cuadro pucelano lo sabía. Y así lo celebró. Con su gente, con la afición que subía al estadio dos horas antes con el mismo temor que podía saltar su equipo al campo; y que lo disfrutó tanto o más.
El Real Valladolid alcanza los 30 puntos, quizá le falten 10 para la permanencia o quizá menos, pero sabe que esta solo la conseguirá sumando de tres en tres, y ganando en casa. El próximo domingo llega el Valencia y cualquier ocasión es buena.
Real Valladolid: Jaime, Rukavina, Rueda, Valiente, Peña, Álvaro Rubio (Rossi, min. 73), Víctor Pérez, Larsson (Omar, min. 85), Óscar, Manucho y Guerra (Jeffren, min. 73).
Almería: Esteban, Rafita, Trujillo, Torsiglieri, Mané, Tébar, Corona (Azeez, min. 82), Suso, Aleix Vidal, Soriano (Zongo, min. 60) y Óscar Díaz (Rodri, min. 67).
Árbitro: Teixeira Vitienes (colegio cántabro). Expulsó al visitante Torsiglieri por doble amonestación (min. 26 y 75). Además, mostró amarilla a Rukavina (min. 6) y Larsson (min. 80), por el Real Valladolid.
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